La primavera animaba a
salir al campo y qué mejor que visitar uno de los parajes boscosos más
impresionantes de la península Ibérica: la Serranía de Cuenca. Sus extensos
pinares, en un agreste territorio dominado por roquedos y cortados sobre roca
caliza, le han valido su declaración como Parque Natural en 2007.
Nuestro punto de encuentro
y alojamiento fue el camping de Las Majadas, pequeña localidad conquense muy bien situada en
pleno parque natural. Participamos un total de 32 personas, mitad adultos y
mitad peques. El tiempo fue radiante con temperaturas agradables y buena
compañía.